Puesto que se trata de un conocimiento vagamente sistemático y profundamente esotérico, que unas veces acierta y otras no, y que encuentra una explicación plausible a cualquier resultado que se produzca, no es mucho lo que diferencia a un economista de un astrólogo. De hecho, la economía podría llegar a ser una ciencia si se limitara a ser una ciencia forense. Porque nos explica de qué ha muerto el tipo, pero pocas veces acierta a salvarlo.
Fuente: Deconstruir la econocracia, http://ruizdequerol.wordpress.com/2009/06/11/deconstruir-la-econocracia/
No hay comentarios:
Publicar un comentario